Escribe Guillermo Pensado: Los emprendedores, semilla de la minería mundial
16-06-2016
MINING PRESS
GUILLERMO PENSADO*
La industria minera metalífera es una industria de alto riesgo, sobretodo en la etapa de exploración. El trabajo de Guj y Bartrop (2009) sobre las probabilidades de un descubrimiento mineral en nuevas regiones o “greenfields” en países de bajo riesgo político entre los años 1985 y 2003 es contundente. La probabilidad de encontrar un deposito significante o “major” es de 0.3%, o lo que es igual, 1 descubrimiento cada 300 proyectos explorados. Esta probabilidad baja 0.07% si buscamos un gran depósito de clase mundial, o sea 1 gran descubrimiento cada 1400 proyectos de exploración.
Este dato, “supuestamente” bien entendido en el sector, debe ser tenido “muy” en cuenta por aquellos gobiernos que buscan desarrollar esta industria. Para ello deberían buscar cumplir con los tiempos procesales previstos en el Código de Minería de la República Argentina para reducir los tiempos burocráticos que muchas veces retrasan los expedientes y por ende representan una traba para la exploración y la movilidad de nuevos inversores.
Por otro lado, deberán tener una política de promoción minera que atraiga “muchos” inversores de alto riesgo que exploren activamente para poder tener una cadena de descubrimientos que mantengan la producción en el tiempo.
Si además entendemos que las grandes empresas mineras tienen en general un muy bajo ratio de descubrimiento (muchas veces por burocracia privada) y que las mismas se nutren de la adquisición de proyectos; vemos entonces que el gran “disparador” de la cadena de exploración minera comienza con los “emprendedores” mineros locales que invierten sus ahorros en catear nuevas áreas y su tiempo en promocionarlo a inversores mineros (o no) de mayor escala.
Este concepto de “emprendedurismo” (actualmente en boga), representa el gran “semillero” de proyectos de cual se nutren pequeñas y grandes empresas mineras de todo el mundo (como los potreros y clubes de barrios nutren al futbol internacional). Sin embargo, su rol no es siempre bien entendido ni por gobiernos ni por grandes empresas; y como resultado son menospreciados.
Cuando de hecho, los “emprendedores” mineros están cumpliendo con roles abandonados por ambos sectores. Ellos invierten sus ahorros en proyectos con gran riesgo realizando trabajos exploratorios iniciales en regiones donde difícilmente se vea inversión de grandes productores. Luego promocionan sus proyectos y con ello nuevas regiones, provincias (algunas anti-mineras incluso) y hasta países.
Y por ltimo, muchos de ellos terminan atrayendo inversiones nacionales y extranjeras de pequeña a gran escala, y desarrollando nuevos distritos mineros.
La industria minera argentina ya está pagando por ello, y hoy vemos un desfasaje entre las minas por cerrar y los nuevos proyectos que no aparecen. El gran desafío ahora es recuperar la exploración intensiva para lo cual se precisará, además de inversiones de alto riesgo de todo tipo; de nuevas ideas de exploración y de catastros mineros transparentes donde se cumplan los plazos y requisitos de procedimientos previstos para cada etapa de desarrollo minero.
Este es un desafío del sector en general y debemos aprovechar esta nueva “ventana” de inversiones para fortalecer las bases de esta industria fomentando el “emprendedurismo” minero como fuente proveedora de nuevos proyectos mineros.
*Geólogo de Exploración
http://www.miningpress.com/debate/298603/escribe-guillermo-pensado-los-emprendedores-semilla-de-la-mineria-mundial
La industria minera metalífera es una industria de alto riesgo, sobretodo en la etapa de exploración. El trabajo de Guj y Bartrop (2009) sobre las probabilidades de un descubrimiento mineral en nuevas regiones o “greenfields” en países de bajo riesgo político entre los años 1985 y 2003 es contundente. La probabilidad de encontrar un deposito significante o “major” es de 0.3%, o lo que es igual, 1 descubrimiento cada 300 proyectos explorados. Esta probabilidad baja 0.07% si buscamos un gran depósito de clase mundial, o sea 1 gran descubrimiento cada 1400 proyectos de exploración.
Este dato, “supuestamente” bien entendido en el sector, debe ser tenido “muy” en cuenta por aquellos gobiernos que buscan desarrollar esta industria. Para ello deberían buscar cumplir con los tiempos procesales previstos en el Código de Minería de la República Argentina para reducir los tiempos burocráticos que muchas veces retrasan los expedientes y por ende representan una traba para la exploración y la movilidad de nuevos inversores.
Por otro lado, deberán tener una política de promoción minera que atraiga “muchos” inversores de alto riesgo que exploren activamente para poder tener una cadena de descubrimientos que mantengan la producción en el tiempo.
Si además entendemos que las grandes empresas mineras tienen en general un muy bajo ratio de descubrimiento (muchas veces por burocracia privada) y que las mismas se nutren de la adquisición de proyectos; vemos entonces que el gran “disparador” de la cadena de exploración minera comienza con los “emprendedores” mineros locales que invierten sus ahorros en catear nuevas áreas y su tiempo en promocionarlo a inversores mineros (o no) de mayor escala.
Este concepto de “emprendedurismo” (actualmente en boga), representa el gran “semillero” de proyectos de cual se nutren pequeñas y grandes empresas mineras de todo el mundo (como los potreros y clubes de barrios nutren al futbol internacional). Sin embargo, su rol no es siempre bien entendido ni por gobiernos ni por grandes empresas; y como resultado son menospreciados.
Cuando de hecho, los “emprendedores” mineros están cumpliendo con roles abandonados por ambos sectores. Ellos invierten sus ahorros en proyectos con gran riesgo realizando trabajos exploratorios iniciales en regiones donde difícilmente se vea inversión de grandes productores. Luego promocionan sus proyectos y con ello nuevas regiones, provincias (algunas anti-mineras incluso) y hasta países.
Y por ltimo, muchos de ellos terminan atrayendo inversiones nacionales y extranjeras de pequeña a gran escala, y desarrollando nuevos distritos mineros.
los 'emprendedores' mineros están cumpliendo con roles abandonados por ambos sectores
Esa falta de entendimiento ha llevado a desarrollar políticas
empresariales y políticas que terminan atentando contra el mismo
desarrollo del sector. Las grandes empresas productoras poco participan
en ayudar, sea a través de Cámaras Empresariales
o intercambio de ideas, en el desarrollo de nuevos emprendedores. Las
autoridades mineras, la mayoría con grandes retrasos burocráticos en el
avance de sus expedientes mineros, buscan trabar el “emprendedurismo”
minero con altas tasas para la exploración y poniéndole trabas en sus
expedientes para finalmente desincentivar su desarrollo.La industria minera argentina ya está pagando por ello, y hoy vemos un desfasaje entre las minas por cerrar y los nuevos proyectos que no aparecen. El gran desafío ahora es recuperar la exploración intensiva para lo cual se precisará, además de inversiones de alto riesgo de todo tipo; de nuevas ideas de exploración y de catastros mineros transparentes donde se cumplan los plazos y requisitos de procedimientos previstos para cada etapa de desarrollo minero.
Este es un desafío del sector en general y debemos aprovechar esta nueva “ventana” de inversiones para fortalecer las bases de esta industria fomentando el “emprendedurismo” minero como fuente proveedora de nuevos proyectos mineros.
*Geólogo de Exploración
http://www.miningpress.com/debate/298603/escribe-guillermo-pensado-los-emprendedores-semilla-de-la-mineria-mundial
No hay comentarios:
Publicar un comentario